Cómo elegir la chimenea perfecta para tu piso

Hace no mucho tiempo, se contemplaba que los pisos tuvieran chimeneas, al igual que las viviendas unifamiliares. De hecho, muchos edificios antiguos se construían con salida de humos para chimeneas. Con la llegada de los sistemas de calefacción modernos, este uso se ha ido perdiendo y cada vez era más raro encontrar pisos con chimeneas. Sin embargo, hoy en día son cada vez más las personas que no quieren resignarse a perderse disfrutar de una chimenea, aunque vivan en un piso.

Si te estás preguntando si podrías disfrutar de una chimenea en tu piso, y la respuesta es que sí, te interesa este artículo. Algunos sistemas de combustión serán más sencillos de instalar que otros, en función de las características del piso en el que vivas. A continuación analizaremos los distintos tipos de chimeneas para que puedas elegir la mejor chimenea por tu piso.

Chimeneas de Bioetanol

Son, junto con las eléctricas, las chimeneas más sencillas de colocar en cualquier piso. No requieren instalación ni salida de humos. Además, la mayoría ni siquiera necesitan ningún tipo de revestimiento. Simplemente hay que colgarlo (o colocarlo sobre algo), verter un poco de bioetanol y listo.
La pega es que su poder calorífico es bastante limitado. Pueden calentar una estancia pero están más pensadas para crear un ambiente confortable que para calentar una vivienda.

Chimeneas eléctricas

Otra opción viable para cualquier piso, puesto que tampoco necesitan instalación ni salida de humos. Existen modelos eléctricos para revestir o, directamente, para colgar.
El fuego en estos casos no es real, es simulado, aunque en muchos casos de lo más logrado. Sin embargo, estas chimeneas producen calor (como una estufa eléctrica). Suelen incluir mando a distancia y distintos modos de llamas y colores.
Merecen una mención especial las chimeneas eléctricas con sistema de vapor de agua que generan el efecto de las llamas con un realismo alucinante.

Chimeneas de gas

Si en tu casa tienes gas natural, una chimenea de gas puede ser una buena opción para ti. Aunque las chimeneas de gas necesitan salida de humos, ésta es muy pequeña y puede ir directamente a la fachada, por lo que no necesita grandes obras.
En caso de no tener gas natural, se podría instalar una butano o propano, aunque habría que buscar un lugar adecuado para la bombona como balcón, terraza, etc.
Las chimeneas de gas pueden canalizarse para obtener más salidas de calor y calentar así toda la vivienda. Además, muchas de ellas están pensadas para que la visión del fuego sea máxima, resultando muy decorativas. Como inconveniente, las chimeneas de gas suelen tener un precio bastante elevado.

Chimeneas de biomasa

Tanto si son de pellets como de leña, este tipo de chimeneas son las más complicadas para instalar en un piso, porque necesitan un tiro vertical. Si vives en un edificio antiguo, puede que tu edificio tenga tiro para chimenea, en cuyo caso no tendrías ningún problema. Si vives en un ático o en el último piso de tu edificio, el tiro puede salir por la cubierta. En este caso, necesitas permiso de la comunidad, pero es relativamente sencillo conseguirlo. Si tu piso no cumple ninguna de estas condiciones, necesitarás sacar un tiro por la fachada o por el patio de luces. En ese caso, dependerá de que tu comunidad te dé permiso para hacerlo o no.
La ventaja de este tipo de chimeneas es que utilizan un combustible económico, ecológico y que pueden calentar toda la casa.

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